San Valentín y el CATFISHING

Terminadas las fiestas navideñas, el Día de San Valentín se acerca. Ese día en el que competimos con las películas románticas para ver quien hace el mayor acto de amor.

Para aquellas personas que hayan llegado a este día sin pareja y quieran ponerse a la búsqueda de su amor, recordadles que deben tener cuidado con las relaciones en el mundo digital. Seguro que habéis oído u os suena el concepto catfishing. Y no, no es adoptar un gato para que nos pueda hacer compañía.

El catfishing se trata de una forma de engaño en la que un ciberdelincuente crea una identidad falsa en internet, generalmente en redes sociales o aplicaciones de citas, con el objetivo de “establecer” una relación romántica o amistosa con alguien.

El ciberdelincuente que practica el catfishing utiliza fotos, información y detalles inventados u obtenidos de otra persona para construir una identidad que puede ser muy diferente de su verdadera personalidad.

Además de ser decepcionante para la persona que lo sufre, también tiene una serie de riesgos asociados. Algunos de ellos son:

  1. Fraude Financiero. Algunos ciberdelincuentes utilizan estas identidades para estafar solicitando dinero o información personal bajo pretextos.

 

  1. Acoso y Amenazas. Una vez que la víctima descubre la situación, los ciberdelincuentes pueden acosar, intimidar o amenazar.

 

  1. Violación de la Privacidad. Al intercambiar información personal con la víctima, se conoce muchos aspectos de su vida. Esta información puede suponer una violación de la privacidad y un uso de la información en otros actos poco éticos.

 

  1. Riesgos de la Seguridad Cibernética. Las víctimas pueden quedar expuestas a riesgos como instalación de malware o pérdida de información sensible.

Algunos de los consejos que podemos darte para evitar este catfishing son:

  • Antes de continuar involucrándote emocionalmente, verifica la identidad de la persona pidiendo fotos actuales, con videollamadas o buscando inconsistencias en la información que te facilita.
  • Procura no dar información sensible a personas en línea.
  • Desconfía de historias dramáticas o que puedan parecer urgentes e investiga en línea.
  • Utiliza plataformas con medidas de seguridad y verificación de la identidad.
  • Configura las opciones de privacidad de tus redes sociales.
  • Actualiza el software de seguridad de tus dispositivos.

 

Ahora ya conoces un poco más uno de los conceptos que están de moda. Y recuerda, no te dejes llevar por situaciones que pueden parecer demasiado buenas para ser verdad, confía en tu instinto y evalúa la situación para no ponerte en peligro.

Es mejor pasar el día con tranquilidad y comerse un helado mientras vemos una película romántica deseando ser protagonista, a descubrir que esa persona especial con la que hemos conectado tantísimo, no existe.

 

Daniel Pérez

Equipo ES-CIBER